(CATOLIN).- En una ceremonia realizada en la Basílica Menor de Santa Ana, comenzó el camino hacia la beatificación de Laureana «Ka Luring» Franco, fallecida en 2011.

Los trámites fueron inaugurados por el obispo de Pasig, Mylo Hubert Vergara, quien anunció la creación de una Comisión Histórica, encargada de examinar la extensa obra escrita de Franco y sus contribuciones a la Iglesia.

Erickson Javier, postulador de la causa, presentó el «supplex libellus» al obispo Vergara durante el acto, detallando la biografía de Franco y destacando sus virtuosos actos como catequista laica.

En respuesta a la presentación, el obispo Vergara expresó su continuo apoyo a los esfuerzos de beatificación y canonización, haciendo hincapié en el reconocimiento de Franco como sierva de Dios.

Laureana Franco, nació en el seno de una familia modesta en Hagonoy, Taguig City, el 4 de julio de 1936, era la mayor de ocho hermanos. Falleció en 2011 a la edad de 75 años. El compromiso de su familia con la oración sentó unas sólidas bases espirituales, que la llevaron a unirse a la Legión de María y a profundizar en su devoción a la Virgen.

Su trayectoria espiritual estuvo marcada por importantes reconocimientos, como el Premio Madre Teresa de Calcuta del Papa Juan Pablo II en 2002 y el Pro Ecclesia et Pontifice en 1990.

La carrera de Franco pasó de telefonista de las Fuerzas Aéreas filipinas a catequista a tiempo completo en los años sesenta, lo que demuestra aún más su compromiso con la fe y la comunidad.

Fue una de las primeras ministras laicas de la archidiócesis de Manila autorizadas a administrar la comunión. Su legado se caracteriza por su inquebrantable servicio a los desfavorecidos y su sencilla pero profunda vida espiritual.

Es recordada como «Ka Luring», un testimonio de su arraigada influencia dentro de su comunidad y de la Iglesia.