El sínodo es usado para desmantelar la jerarquía eclesiástica, denuncia el Cardenal Zen
– En vista del desarrollo del XVI Sínodo Ordinario de los Obispos, centrado en la «sinodalidad», que se está llevando a cabo en Roma. En un artículo publicado en su blog, Zen expresó su profunda preocupación por la dirección que está tomando el sínodo, destacando que algunos de los temas que se están abordando podrían alterar de manera significativa la estructura y doctrina de la Iglesia Católica.
Cardenal Zen
(CATOLIN).– El cardenal Joseph Zen Ze-kiun, obispo emérito de Hong Kong, ha hecho un llamado a la oración y al ayuno en vista del desarrollo del XVI Sínodo Ordinario de los Obispos, centrado en la «sinodalidad», que se está llevando a cabo en Roma. En un artículo publicado en su blog, Zen expresó su profunda preocupación por la dirección que está tomando el sínodo, destacando que algunos de los temas que se están abordando podrían alterar de manera significativa la estructura y doctrina de la Iglesia Católica.
El cardenal Zen señaló que, desde su inicio, el sínodo ha levantado controversias debido a la participación de un número significativo de «no obispos» con derecho a voto. Esta situación, según Zen, desvirtúa la naturaleza original de los sínodos de obispos establecidos por el Papa Pablo VI, los cuales estaban diseñados para que el Papa escuchara y consultara a sus «hermanos obispos». «Cuando hay ‘no obispos’ votando, ya no es un sínodo de obispos», subrayó el cardenal, quien considera que este cambio amenaza con debilitar la jerarquía tradicional de la Iglesia.
Preocupaciones doctrinales y morales
Uno de los aspectos más delicados que Zen aborda en su escrito es el tema de la moral sexual y, específicamente, la posibilidad de bendecir a parejas del mismo sexo. En 2021, la Congregación para la Doctrina de la Fe, bajo la dirección del Papa Francisco, respondió con un firme «no» a la pregunta de si la Iglesia podía bendecir tales uniones. Sin embargo, el cardenal denuncia que, desde entonces, se ha vuelto a poner este tema en discusión, lo que genera confusión entre los fieles.
Zen afirmó que cinco cardenales, incluido él mismo, presentaron una serie de preguntas al Papa antes del sínodo, solicitando claridad sobre su postura respecto a la enseñanza de la Iglesia sobre la moral sexual. A pesar de que inicialmente el Papa reafirmó la postura tradicional, la respuesta que recibieron posteriormente fue más ambigua, sugiriendo que «en ciertos contextos» podría permitirse la bendición de parejas homosexuales. Según el cardenal Zen, esto no solo contradice la enseñanza anterior de la Iglesia, sino que representa un esfuerzo por cambiar la doctrina, lo cual califica como una «acción violenta» contra la jerarquía eclesiástica.
«Si este asunto no se resuelve en el sínodo, el futuro de la Iglesia será muy incierto», advirtió Zen, señalando que, mientras el sínodo continúa, hay quienes impulsan activamente una agenda de cambio fuera de las reuniones oficiales, lo que incluye a organizaciones que promueven la ideología de género.
Zen se mostró especialmente preocupado por la influencia que podrían tener estas presiones sobre las futuras decisiones del sínodo, que culminará en 2024, especialmente en temas como la moral sexual, la bendición de parejas homosexuales y el papel de los laicos dentro de la estructura de la Iglesia.
Impacto en la unidad de la Iglesia
El cardenal Zen también lamentó que la falta de claridad en estos debates ha generado una división entre los fieles y dentro de la misma jerarquía de la Iglesia. Mencionó que, históricamente, la Iglesia ha sufrido pocas divisiones tan profundas como las que se están gestando ahora. «Desde la publicación del documento Fiducia Supplicans, la Iglesia ha experimentado una división sin precedentes, y los fieles están profundamente confundidos», afirmó.
Además, Zen expresó su temor de que este proceso sinodal esté encaminando a la Iglesia hacia un modelo más democrático, que otorgue más poder a los laicos en detrimento de la autoridad de los obispos y el Papa. Sugirió que algunos defensores de la sinodalidad podrían estar buscando una mayor autonomía para las iglesias locales y las conferencias episcopales, un cambio que, en su opinión, podría llevar a una fragmentación similar a la que ha vivido la Iglesia Anglicana.
Un llamado a la oración y la esperanza
A pesar de su preocupación por el rumbo del sínodo, el cardenal Zen hizo un firme llamado a la esperanza, invitando a los católicos de todo el mundo a intensificar su oración, especialmente rezando el rosario, y a practicar el ayuno para pedir la intervención divina. «No sirve de nada preocuparnos por estos problemas. Ayunemos y recemos», insistió el cardenal, recordando que la oración es un medio poderoso para enfrentar las crisis en la Iglesia.
El cardenal concluyó su mensaje subrayando tres objetivos clave que los fieles deben tener presentes mientras rezan por el sínodo: primero, que el proceso sinodal vuelva a un formato donde los obispos tengan la voz y el voto principal; segundo, que los debates sobre cuestiones morales, como la bendición de parejas homosexuales, sean tratados con claridad y sin generar divisiones; y tercero, que el enfoque del sínodo en la «sinodalidad» no conduzca a una democratización de la estructura eclesiástica que ponga en peligro la unidad y la identidad católica.
CEO de CATOLIN, Lic. en comunicación por la Universidad Anáhuac Veracruz Campus Xalapa, Mtro. en Mercadotecnia por la Universidad de Xalapa, Fotógrafo y rapero católico.