(CATOLIN).- En la Basílica de San Pedro, rodeado de un clima de recogimiento y expectación, el cardenal Giovanni Battista Re, Decano del Colegio Cardenalicio, presidió esta mañana la misa Pro eligendo Romano Pontifice, con la que se encomienda al Espíritu Santo la elección del nuevo Papa. En su homilía, Re exhortó a los cardenales a votar con “la mayor responsabilidad humana y eclesial”, dejando de lado intereses personales y buscando únicamente el bien de la Iglesia y de la humanidad.

Durante la celebración, que tuvo lugar en el Altar de la Confesión, donde reposan los restos del apóstol Pedro, concelebraron 220 cardenales, tanto electores como no electores. Entre ellos, se encontraba ya el futuro 267º sucesor de San Pedro.

La misa inició con la antífona: «Suscitaré un sacerdote fiel, que obrará según los deseos del corazón de Dios», enmarcando así el espíritu de discernimiento que marcará las votaciones que comenzarán esta misma tarde a las 16:30, en la Capilla Sixtina.

“El acto que realizarán es de máxima responsabilidad humana y eclesial”, subrayó el cardenal Re, quien recordó que la elección del nuevo Papa “no es una simple sucesión de personas, sino que es siempre el apóstol Pedro que regresa”.

En su homilía, centrada en el mandamiento del amor proclamado en el Evangelio de Juan, el purpurado enfatizó que “el amor es la única fuerza capaz de cambiar el mundo” y que este debe ser el sello de todo verdadero pastor. “La cualidad fundamental de los pastores es el amor hasta el don total de sí, junto con la ayuda mutua y el compromiso por la comunión eclesial y la fraternidad humana universal”, afirmó.

Re también recordó que uno de los deberes esenciales del sucesor de Pedro será “acrecentar la comunión” en la Iglesia, que no significa uniformidad, sino unidad en la diversidad, siempre en fidelidad al Evangelio. “La Iglesia debe ser casa y escuela de comunión”, insistió.

En un contexto global de creciente complejidad, secularización y desafíos morales, el cardenal decano elevó una plegaria: “Recemos para que Dios conceda a la Iglesia el Papa que mejor sepa despertar las conciencias de todos y las fuerzas morales y espirituales en la sociedad actual, caracterizada por un gran progreso tecnológico, pero que tiende a olvidarse de Dios”.

Bajo el imponente fresco del Juicio Final de Miguel Ángel, los cardenales electores iniciarán el Cónclave esta tarde con el deseo —como expresó Re— de lograr ponerse de acuerdo “en elegir al Papa que necesita nuestro tiempo”.