(CATOLIN).- El Arzobispo de Oviedo, Monseñor Jesús Sanz Montes, ha reafirmado su descontento con la declaración Fiducia supplicans, emitida por el Dicasterio para la Doctrina de la Fe y firmada por el Papa, que permite la bendición a parejas homosexuales. En su carta pastoral de esta semana, Sanz Montes expresó su preocupación y críticas hacia esta medida, calificándola de tener «una intencionalidad confusa y acomplejada» y de retorcer la verdad de la tradición cristiana.

El obispo franciscano comenzó abordando la situación internacional, lamentando que «la humanidad sigue sin aprender de sus propios errores» y señalando la persistencia de conflictos bélicos en diversas partes del mundo. Además, denunció la manipulación de conciencias a través de ideologías y agendas políticas que buscan deconstruir la tradición cristiana.

En el ámbito nacional, Monseñor Sanz Montes no escatimó críticas a la situación política en España, describiendo la política actual como «torticera» y centrada en intereses propios, lo que, según él, amenaza la convivencia y la igualdad de los pueblos.

A diferencia de otros miembros del episcopado español, Sanz Montes no guardó silencio sobre la situación interna de la Iglesia. Reconoció la falta de serenidad y claridad dentro de la institución y lamentó los recientes acontecimientos, como la masacre en Nigeria durante la pasada Navidad.

El punto culminante de sus críticas fue la declaración Fiducia supplicans, que autoriza la bendición a parejas homosexuales. Sanz Montes cuestionó el motivo detrás de esta medida, preguntando: «¿A qué viene ese brindis campanudo por bendecir lo que Dios no bendice, cuando desde siempre hemos bendecido a las personas y no sus derivas y sus relaciones?».

El arzobispo de Oviedo afirmó que seguirán bendiciendo a quienes lo soliciten, buscando poner sus vidas bajo la luz de Dios y acordes a su gracia, a pesar de la discrepancia con la reciente declaración papal.