(CATOLIN).– El obispo de la diócesis de Plasencia, Mons. Ernesto Brotons, ha decidido apartar temporalmente de sus labores al sacerdote Alfonso Masa Soto, quien ha sido detenido (y puesto en libertad con cargos) por la Guardia civil.

Dicha decisión fue dada a conocer por la diócesis a través de un comunicado: “El pasado día 20 amanecíamos con la lamentable noticia de la detención el día anterior del sacerdote de nuestra diócesis, D. Alfonso Raúl Masa Soto, en su domicilio de Don Benito, por supuesto tráfico de sustancias estupefacientes”, cita el texto.

Luego de que el caso estallara, la diócesis de Plasencia reitreró su “dolor y consternación por el sufrimiento y escándalo que los hechos descritos y las circunstancias que lo rodean suponen”.

La diócesis enfatiza que continúan atentos al proceso judicial y “dispuestos a colaborar con la Justicia en todo aquello que se nos requiera”. Por otro lado, insisten “en la prudencia y el respeto a las personas implicadas que debe prevalecer sobre cualquier otra consideración”.

Mientras los hechos se esclarecen, así como la resolución de la causa, “se ha considerado conveniente, en este momento, apartarle temporalmente del ejercicio público del ministerio y de su oficio de párroco de la de San Sebastián, así como de la residencia parroquial, mientras duren las acciones procesales que correspondan”, confirmó el obispado.

Asimismo, señaló que para este tiempo, se designará para la citada parroquia un Administrador parroquial. No obstante, la diócesis subraya que se procurará al sacerdote “el seguimiento y acompañamiento psicológico y espiritual pertinente”.

Sobre lo acontecido

De acuerdo a los hechos acontecidos la Guardia Civil encontró un alijo con dos kilos de mefedrona (una droga popular en el “ambiente” gay) durante el registro de la vivienda en la que reside Alfonso Raúl Masa y el hombre al que se considera su pareja.

La pareja presuntamente recibió un envío procedente de Alemania de mefedrona, mefe, una sustancia con efectos anfetamínicos y estimulantes, muy popular en ambientes homosexuales por sus efectos afrodisiacos.

La ‘Operación Botafumeiro’ fue realizada por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas de la Guardia Civil de Badajoz (EDOA), que siguió al párroco hasta descubrir que la venta se producía en su propia vivienda.

Los agentes llevaban semanas investigando a la pareja tras recibir una denuncia sobre ese aparente tráfico de drogas, formulada por uno de los clientes.

Las investigaciones señalan que el sacerdote y su supuesto novio estaban vendiendo la sustancia al por menor.

Asimismo, descubrieron que recibían la Viagra mediante el envío por paquetería procedentes de varios países de Europa para su distribución y venta. Con el material, la fraccionaban en pequeñas cantidades que a su vez enviaban a sus clientes a distintos puntos de España.

Recabadas las pruebas incriminatorias el sacerdote como su supuesto novio fueron detenidos por un supuesto delito contra la salud pública y una vez instruidas las correspondientes diligencias, fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial, decretando ésta el ingreso en prisión de la presunta pareja del sacerdote y la libertad con cargos para el sacerdote. Hasta ahora, la investigación continúa.