(CATOLIN). – Desde la elección del cardenal Robert Francis Prevost como Papa León XIV, sus gestos, discursos y antecedentes han sido puestos bajo la lupa de analistas y medios internacionales. Algunos sectores, especialmente progresistas, han mostrado inquietud ante ciertas posiciones que sostuvo en el pasado, especialmente aquellas críticas a la llamada ideología «woke» y a la representación mediática de valores contrarios al Evangelio.

El vaticanista Francis X. Rocca, del Register, recordó en un artículo reciente la intervención que Prevost realizó en octubre de 2012 durante el Sínodo sobre la Nueva Evangelización, cuando aún era prior general de los agustinos. En esa ocasión, Prevost advirtió sobre el impacto cultural de los medios de comunicación occidentales, señalando que «fomentan la simpatía por prácticas que están contra el Evangelio, como el aborto, la eutanasia o el estilo de vida homosexual». Además, denunció que la televisión y el cine presentan de manera «benigna y compasiva» a las llamadas «familias alternativas», lo que dificulta la comprensión auténtica del mensaje cristiano.

Este discurso, ahora recuperado en vídeo, ha sido utilizado por activistas LGBTQ y medios progresistas como la Cadena Ser en España y The Guardian en Reino Unido, para expresar su preocupación sobre el enfoque que podría adoptar el nuevo pontífice.

Aunque el propio León XIV ha matizado en años recientes algunas de esas posturas, aclarando que la Iglesia debe ser acogedora sin renunciar a la doctrina, sus mensajes en la red social X -activa desde 2011- también han sido objeto de escrutinio. En ella, además de retuits en defensa de los migrantes y mensajes a favor de la familia tradicional, se han encontrado críticas a figuras políticas como Donald Trump y contenidos humorísticos considerados polémicos por ciertos sectores.

Cabe recordar que su nombramiento en 2023 como prefecto del Dicasterio para los Obispos fue visto por algunos como un signo de apertura por parte del Papa Francisco, pese a su trayectoria contracultural en temas delicados.

En su primera homilía como Papa, pronunciada en la Capilla Sixtina, León XIV reafirmó que la fe cristiana sigue siendo vista en muchos ambientes como absurda y relegada, señalando que en el mundo actual se buscan otras seguridades como el éxito, el dinero o el placer. No obstante, días después, al reunirse nuevamente con los cardenales, manifestó su voluntad de continuar el diálogo con el mundo contemporáneo, en línea con la orientación de su predecesor.