(CATOLIN).-

Timothy Radcliffe, miembro destacado del lobby LGBT en la Iglesia, dirigirá a los obispos católicos y a los participantes de la XVI asamblea general ordinaria del Sínodo de los Obispos, en el próximo retiro que se realizará cerca de Roma del 1 al 3 de octubre de 2023.

El anuncio lo dio el Cardenal Jean Claude Hollerich, quien funge como Relator General del Proceso Sinodal Global de cuatro años, al explicar que la sesión sinodal programada para octubre 2023 comenzará con el retiro a cargo de Radcliffe, quien en el pasado ha dado declaraciones polémicas como considerar que la Tradición es una tiranía y que las relaciones homosexuales pueden expresar la autodonación de Cristo.

En el 2013, en el Anglican Pilling Report, Radcliffe quien estuvo al frente de la Orden de los Predicadores de 1992 a 2001, escribió sobre las relaciones homosexuales que: “no podemos comenzar con la pregunta de si está permitido o prohibido. Debemos preguntarnos qué significa y hasta qué punto es eucarística. Ciertamente puede ser generosa, vulnerable, tierna, mutua y no violenta. Así que, en muchos sentidos, creo que puede ser expresiva de la auto donación de Cristo”.

En 2017, el dominico habló en contra del uso de la Tradición para abordar la cuestión del matrimonio y divorcio.

La XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos se llevará a cabo en dos sesiones. La primera se realizará del 4 al 29 de octubre de 2023, y la segunda en octubre de 2024.

El retiro de los obispos y la vigilia ecuménica de oración se realizará en los días inmediatamente anteriores.

Durante una rueda de prensa el Cardenal Hollerich declaró que “no le preocupa… que haya opiniones diferentes en la Iglesia católica”, sino que ve “las tensiones… como algo positivo”.

“No necesitamos el sínodo en la Iglesia católica para experimentar tensiones. Ya hay tensiones sin el sínodo y estas tensiones provienen del hecho de que cada uno honestamente quiere ver o compartir cómo podemos seguir a Cristo y anunciar a Cristo en el mundo de hoy. Esa es la fuente de las tensiones”, agregó.

“Ahora bien, en el documento para la fase continental del sínodo, vimos la tensión también como algo positivo. Porque para tener una tienda, se necesita cierta tensión. De lo contrario, la tienda se cae. Y creo que el sínodo, la escucha de la Palabra de Dios, la escucha del espíritu, rezar juntos, estar juntos en el camino, aliviará las malas tensiones. No queremos que las malas tensiones destruyan la Iglesia, pero las buenas tensiones a veces son necesarias para la armonía”, finalizó Hollerich.

El Cardenal Hollerich cree que la bendición por parte de la Iglesia de las uniones entre personas del mismo sexo, contra la que se ha pronunciado el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, no es una cuestión resuelta.