(CATOLIN).- Chad Scharf, Vicepresidente de Ingeniería de Software en la empresa de gestión de contraseñas Bitwarden en EE.UU., fue despedido por negarse a violar sus creencias religiosas y por no comulgar con las imposiciones de la ideología de género que la empresa quiere imponer a sus empleados.

Las causas de su despido se debieron al haber puesto en su perfil, en el apartado de condición sexual, el término “Asignado por Dios”. Antes de su despido fue presionado para no hacer referencia a la asignación de sexo para cada persona por parte de Dios.

Scharf inició a laborar para Bitwarden en 2020, un año antes de que se iniciaran las imposiciones “inclusivas” de la empresa.
“En última instancia, me despidieron porque mi fe ‘podría ofender’ a alguien o podría haber hecho que alguien ‘no se sintiera bienvenido’”, declaró Scharf a LifeSiteNews por correo electrónico.

“Estas son las declaraciones utilizadas por el jefe de Recursos Humanos para quejarse ante el CEO que razonó que mi fe estaba de alguna manera acosando a la gente a través de la declaración de ‘asignado por Dios’ en el campo de pronombre de mi perfil de Slack”.

“Ni siquiera hubo una queja real de acoso u ofensa, se basó puramente en la señalización de mi condición y la mera especulación”, continuó.

Aun con las demandas de cuatro instancias de la dirección, Chad se negó a faltar la verdad y a violar su fe católica, incluso participó “en un comité sobre el tema de la ‘inclusión’ y aportó ideas sobre cómo Bitwarden podría modificar su enfoque de la ‘inclusión’ para ser verdaderamente inclusivo con todas las creencias, religiones y credos”.

En una carta escrita al director general de Bitwarden, Michael Crandell, explicó “por qué no podía dejar de lado sus creencias católicas mientras trabajaba”. Y en agosto de 2022, se volvió a pedir a Scharf que eliminara las referencias a su fe porque “RRHH dijo que dos empleados se sentían acosados por la declaración religiosa”.