Sacerdote mexicano es asesinado
P. Javier García Villafaña. Foto por: Facebook de la parroquia de San Marcos.
Por: Ale Villegas
(CATOLIN).– Tras el asesinato del sacerdote agustino Javier Garchando Villafaña, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresó “consternación y dolor” y exigió “una investigación exhaustiva y transparente”.
El cuerpo del sacerdote fue encontrado dentro de su automóvil en la carretera Cuitzeo-Huandacareo, con “heridas por disparo de arma de fuego”, según lo señalado por la Fiscalía General del Estado de Michoacán.
En el comunicado los obispos mexicanos manifestaron: “Condenamos enérgicamente este acto de violencia que no sólo ha arrebatado una vida, sino que también atenta contra la paz y la justicia en nuestra nación”.
“Es un recordatorio doloroso de la grave situación que enfrentamos como sociedad, en la que la presencia del crimen organizado y la impunidad continúan amenazando la vida y la seguridad de tantos”, agregaron.
El P. Javier García Villafaña (DEP) era párroco de la parroquia de San Marcos, en la localidad de Capacho, en el municipio de Huandacareo.
Habría tomado protesta como titular de la parroquia de Capacho, el pasado 25 de abril, de acuerdo a una publicación del semanario Comunidad Cristiana.
Al respecto, el Centro Católico Multimedial indicó que este es el noveno sacerdote asesinado durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Estos son los sacerdotes asesinados:
- En 2019
Padre José Martín Guzmán Vega de 55 años, asesinado en agosto en la comunidad de Cristo Rey de la Paz, ejido Santa Adelaida, de la diócesis de Matamoros. Las denuncias que realizó contra el gobierno del Estado fueron duras y severas.
- En 2021
Padre José Guadalupe Popoca Soto de 42 años, párroco de San Nicolás de Bari en Galeana, Zacatepec, diócesis de Cuernavaca, Morelos, asesinado en agosto del 2021.
Padre Gumersindo Cortés González de 63 años, perteneciente al clero de la diócesis de Celaya. El 28 de marzo de 2021, la Fiscalía del Estado de Guanajuato reportó el hallazgo del cuerpo sin vida que presentaba huellas de violencia. El sacerdote se encontraba desaparecido desde el sábado 27 de marzo.
Fray Juan Antonio Orozco Alvarado, de la OFM de 33 años. De acuerdo con los datos proporcionados por responsables de la provincia franciscana a la que pertenecía, el religioso y párroco, junto con otros laicos que le acompañaban, quedaron atrapados en un enfrentamiento entre cárteles rivales. Se dirigía a la celebración de la misa en la comunidad Tepehuana de Pajaritos y en Mezquital, Durango. Los hechos se dieron en la carretera en los límites de los Estados de Durango y Zacatecas.
- En 2022
Padre José Guadalupe Rivas de 58 años, desaparecido desde la tarde del domingo 15 de mayo del 2022; localizado en un rancho cercano a Hacienda Santa Verónica en Tecate de la arquidiócesis de Tijuana. Era presidente de la Casa del Migrante ubicada en la colonia El Descanso en Tecate, a la que se había integrado en el 2021.
Los Padres Javier Campos Morales, SJ de 43 años y Joaquín César Mora Salazar, SJ de 81 años, asesinados al interior de la misión, el 20 de junio del 2022 en Cerocahui, Chihuahua.
A estos asesinatos se suman el del seminarista de la diócesis de Zacatecas, José Dorian Piña, quien fue abatido a balazos mientras circulaba en su camioneta. Con él perdieron la vida dos miembros de su familia.
“Hacemos un llamado urgente a las autoridades competentes para que realicen una investigación exhaustiva y transparente que lleve a la identificación y sanción de los responsables. No podemos permitir que este y otros actos similares queden impunes”, expresaron los obispos mexicanos.
Para la CEM, “es fundamental que se restablezca el Estado de derecho y se garantice la seguridad de todos los ciudadanos, especialmente de aquellos que dedican su vida al servicio de los demás”.
Asimismo, renovaron su “compromiso de anunciar el Evangelio de la paz y la reconciliación en medio de la adversidad”.
“Seguiremos acompañando a nuestras comunidades, fortaleciendo la fe y promoviendo la justicia, la dignidad humana y el diálogo como instrumentos para la transformación social”, puntualizaron.
Entre otras cosas, encomendaron el alma del sacerdote a la misericordia de Dios y pidieron que “estos momentos, sean una semilla de un México más fraterno y solidario”. “Que hoy nos impulse a seguir luchando por la paz y la justicia, y a no sucumbir ante la violencia y la desesperanza”.
“Que María, nuestra Madre y Consuelo de los afligidos, interceda por nosotros y nos ayude a construir un México en el que reine el respeto a la vida y la dignidad de cada persona”, concluyó la CEM.
Ale Villegas es jefa de redacción en CATOLIN, Licenciada en Derecho por la Universidad Veracruzana (UV) y en Geografía por la Universidad Veracruzana.